CARNE A LA PIEDRA


Es una forma de comer carne sin tener que cocinar, fácil, riquisima e ideal para una comida amena y divertida.

Aconsejo que la carne esté cortada finita, sea muy tierna.

Hacer un surtido de ternera, solomillo de cerdo y pollo.

Comerla por ése orden, lo aconsejo por los jugos que va soltando la carne en la piedra, al ser la más jugosa la de ternera o buey, el resto de las carnes irán cogiendo los jugos que sueltan las que se hagan primero.


Calentar la piedra en el horno durante una hora u hora y media a 200º.

Preparar las salsas: a la pimienta, de champiñones (son las que yo suelo usar).


Cuando esté la piedra caliente, encender los quemadores (hay en el mercado un liquido especial para ello) y suelo cerrar con papel de aluminio el hueco que queda por fuera para que el calor se concentre en la piedra.

A la hora de comer, cada comensal va colocando la carne sobre la piedra y salándola al gusto, una vez que la carne esté en el plato de cada uno.


Acompañar con patatas fritas, algún puré o verduras al vapor

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