PAPA DE MENTA



A mediados de los años 50, contaba yo con cinco años de edad, aún recuerdo aquellos vendedores callejeros que en una penca pinchaban palos cubiertos de caramelos y vociferaban continuamente, incitándonos a todos los chiquillos a comprar:  ¡¡ Al ricooooooo pirulí !!  

Pero nuestros mayores recuerdan algo que ha caído prácticamente en el olvido:   


Se remonta ésta historia hasta los años 30 y mediados de los 40 del pasado siglo.   
A la gran dificultad de vivir en aquella Málaga de la última década de los años 30, época de guerra, miseria, pobreza, penurias y sufrimiento se unió el repentino fallecimiento de su jovencísima y querida madre; aquella delicada niña de rubios cabellos y ojos del color del cielo y de la mar en los cálidos días de calma de levante, se quedó sin madre.


Con escasos cuatro años, Lourdes y su hermana de nueve meses quedaron huérfanas, al cuidado de sus tías, mientras su desconsolado padre, noche tras noche trabajaba a destajo en una de las confiterías más emblemáticas de aquella época, preparando los dulces que consumía la burguesía malagueña. 


Fueron pasando los días y en esos años de penuria generalizada, agravada con los efectos de la guerra, ésa niña con escasos nueve o diez años tenía que ayudar a su padre, que quitándose horas de sueño y cuando, con la poca azúcar que podía conseguir de “estraperlo”, en su casa preparaba los rudimentarios dulces de la época, entre ellos las “papas de menta”.  (ni tenía patatas, ni sabía ni se hacía con menta).    


Ese caramelo rudimentario que con azúcar moreno, azúcar de caña, en un perol de cobre removiendo lo iba hirviendo con paciencia y tesón su padre; los hacía en la rústica cocina de la casa familiar, en el “poyo” del frio mármol de la pequeña encimera lo dejaba enfriar y ésas pequeñas y suaves manos impregnadas de harina le daban forma alargada y retorcida al dorado dulce que al degustarse se deshacía lentamente en la boca de la chiquillería.  Papa de menta, aquel rústico caramelo que sabía a gloria bendita.  


Lourdes, la delicada, diminuta, tímida y triste niña pregonaba con su tenue voz su mercancíaa por las calles del barrio malagueño del Molinillo y de Capuchinos las papas de menta; tanto en los días de frio intenso, viento, lluvia o  de un aplastante calor veraniego, Lourdes en rudimentarios cartuchitos de papel de estraza, vendía a una gorda o a una “perra chica” la unidad, dependiendo del tamaño del trozo las rústicas golosinas.


Aún vive en su memoria los recuerdos de aquellos duros años de una forma tan viva, que sus azules ojos se llenan de lágrimas, que resbalan suavemente por sus mejillas, mientras su hermana (Paquita), me cuenta la historia.  Una historia que me llega y rompe el alma.  


La vida de mi queridísima suegra y su hermana Lourdes, ésa niña que vendía las papas de menta y que adoraban a su padre, aquel pastelero que a pesar de tan duros avatares les endulzaba su vida. 


Para hacer papas de menta, únicamente hay que derretir azúcar moreno en una cazuelita, dejándola en ebullición unos pocos minutos.   Volcar el caramelo liquido sobre un “poyete” previamente engrasado con aceite, dejandola enfriar sobre una superficie fría y lisa.
Antes de que se solidifique ir cortándola en trozos y dándoles formas retorciéndolos con las manos aceitosas.
Espolvorear con azúcar glass…


La papa de menta es la versión hecha con azucar moreno, también era habitual hacer los caramelos con miel de caña, la riquisima ARROPIA (pinchando aqui verán la receta que ya publiqué en el año 2010) 
 

En homenaje a todos nuestros mayores que sufrieron las penurias de la difícil época que los tocó vivir.  Y en especial a la familia de mi marido, sus padres (mis queridos suegros Pedro y Paquita), la tía Lourdes y a sus cuatro hijos.

Gracias especialmente a Paco y a su mujer, Cloti, dos magníficos cocineros (ella es chef de una gran empresa multinacional americana) nos hicieron pasar un hermoso día, disfrutando de la naturaleza, de su huerta, de los animales en un precioso entorno en el Valle del Guadalhorce.    

19 comentarios

  1. Curiosísimo!! :D Cada día se aprenden cosas nuevas!! Te han quedado perfectas!
    un besazo y feliz lunes!
    www.mylifeofdetails.blogspot.com

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  2. Que bonito lo cuentas Carmen, me he emocionado y todo. Había oído hablar de las papas de menta, pero no me imaginaba que era eso. Me apunto tu receta porque la haré.

    Un besito!!!

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  3. Que cosa tan curiosa, es una idea genial. Nunca había escuchado hablar de eso.

    Saludos

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  4. Fijate que yo no lo conocía y le pregunto a Manolo y él tampoco, la arropía si la conocemos y la hermos comido, eres un libro abierto y siempre dispuesta a enseñar tu sabiduría.
    Que triste la historia de Lourdes y su hermana, es tan parecida a tantas personas que vivieron aquellos durísimos tiempos, que me ha recordado a mi suegra cuando cuenta como los vivió.

    Besitosss

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  5. Este si que es un homenaje merecido, que tristes historias nos cuentan nuestros padres y abuelos. Me has recordado a mis abuelos materno que hacían papas fritas sólo con las mondaduras y, me mandaban a la aceitería a conprar un cuartillo de aceite que, en aquél entonces lo vendían a granel. Yo de estos caramelos ni idea de que existiesen de lo que si me acuerdo mucho y que ya hace tiempo que se han perdido son los "Al rico caqui" pregonaban así los cucuruchos de merengue de color rosa y blanco y que, cuando los escuchábamos por las calles saliamos corriendo a comprar uno... cuando podíamos claro!!
    Un besote preciosa.
    P.D.
    ¿Has visto a mi hermano Inda de usuario del mes en Canal Cocina?

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    1. Hola Angeles....sí he visto al "Menda lerenda" y te he felicitado por ello...dale mi más cordial enhorabuena.
      Yo también me acuerdo del rico "coqui", ese cucurucho con merengue color rosa pinchado en un palo cuadrado, sin más protección ni higiene que nos sabia a gloria bendita...como de chicos corriamos detrás del vendedor......
      Un besito...

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    2. En Huelva seguimos teniendo coquis. Y estoy buscando la receta, pero no la encuentro :(

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  6. Pues yo tampoco había oido hablar nunca de las papa de menta,no tenía ni idea de que era.Mi madre si ,le he preguntado y dice que las vendían en la esquina de su calle cuando era pequeña y que estaban riquísimas.Todos los días se aprende algo.Gracias Carmen Rosa,un saludo paleño (soy Olimpia)

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    1. Gracias Olimpia...mi paisana "paleña". Siempre con tus amables comentarios.

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  7. No conocía esta receta pero tomo nota porque soy una golosa empedernida.
    Un besito desde Las Palmas y feliz semana.

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  8. desde luego es todo un placer pasar un rato en tu cocina, y además de disfrutar con tus recetas, disfrutar de tus historias y tua palbras cargaditas de sentimiento!!!!

    tendremos que probarlo no??? al final sabré más sobre málaga, que muchos malagueños.. y todo gracias a ti!!!! me encanta el cariño que se desprende del amor que tienes a tu tierra!!! y además lo contagias,que lo sepas!!!

    wapa, vi el mensaje de los bombones, pero vamos a mil con las niñas.. estoy "despegá" jajaja ya verás que si lo haces en moldes flexibles te saldrán perfectos!!

    un besote enorme!!

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  9. Muito interessante,não conhecia!
    Bjs

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  10. Como siempre el post es de lujo me encanta leerte y la receta mas no se cuando podre hacer estos caramelos de papa de menta pero los hare ,me encantan las recetas de nuestros abuel@s nunca deberian perderse.
    Bicos mil wapa.

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  11. Yo no conocí las papas de menta, pero tenemos una foto de mi marido cuando era pequeñito en la que está sonriendo y su madre decía: "mira qué gracioso, parece que tiene una papa de menta en la boca"; es porque se ve la lengua redondita jejeje.
    Nunca he hecho ni papas de menta ni arropías porque me parece que me voy a quemar, anda que...
    Muchos besitos, y gracias por contarnos las cosas con esa poesía que tienes, Toñi.

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  12. Entrañable y maravillosa entrada llena de recuerdos, de poesia y de ternura. Todas me gustan pero esta especialmente me ha llegado muy dentro, la descripción de la escena y de la época son como un cuadro que has pintado en mi retina.

    Un beso muy grande para tus suegros y, ojala te sigan inspirando recetas e historias tan bellas como la de hoy y para ti un beso muy grande corazón!

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  13. Desde luego que escribes de maravilla...le voy a recomendar a mi madre tu blog, que a ella le encantan este tipo de recetas....Muchos kisses wapa!!!

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  14. A mi hijo le gusta escribir, de hecho se autodenomina poeta, siempre le digo que debería escribir la historia de su abuela, mi madre, tan igual a la que cuentas, mi madre, se alimentó de higos,robados de los huertos, una dura historia, que no se debe olvidar,deberías escribir un libro, te expresas muy bien, me recuerdas a Almudena Grandes,y a tantos escritores que han narrado ese tipo de historias, me gusta mucho leerte, yo compraría tu libro!.....los caramelos o papas, no los conozco, pero seguro son muy ricos...besitos

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  15. Nunca habia oido hablar de las papas de menta, leyendote se me deshacian en la boca, pero no me pasaban de la garganta, siempre haces lo mismo, se me hace un nudo que no puedo tragar y me sale por los ojos, pero me dá igual, me alimentas el alma Carmen Rosa, escribes genial, siempre me haces vivir lo que cuentas y por eso te doy las gracias, por eso y por las dos recetas, que no se me han olvidado jejej. Besos

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  16. Llevo toda la vida escuchando a mi madre hablar de las "papas de menta" y aunque he buscado en internet no había encontrado la receta. Hoy me sale al encuentro no sólo la receta sino su historia, su familia... Mi madre duerme y casi la despierto para enseñarle el hallazgo, estoy deseando mostrársela mañana. Muchas gracias por tus posts y por este en especial y un abrazo para esa familia.

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