CREMA DE CHOCOLATE Y NARANJA
Caminaba sola hacia la oficina, pausadamente y con dificultad debido a mi estado, me esperaba unos de esos larguísimos y tensos dias que solía tener en mi estresante e interesante trabajo, miré el reloj y marcaba las 8,30 de la mañana y sentí que era el momento.
Llegué al hospital en menos de una hora y dejaban mi ropa y mis enseres en una bolsa, enseguida me subieron a observación, nuevamente sola hasta las 4 de la tarde, llegaron las visitas, recuerdo la cara de pena de mi madre que no podía estar conmigo, su única hija (debía cuidar a mi abuela con 94 años incapacitada); en breve, nuevamente sola en la habitación, los dolores eran continúos y nadie parecía preocuparse de una madre primeriza encerrada entre cuatro paredes.
Por fin a las 6 voy a quirófano, tres horas y cuarto, hasta que no sin esfuerzos y dolores , él llegó; a las 9 y quince minutos pude ver su carita durante un breve momento que lo sostuve en mi pecho, hasta que a las 12,30 de la noche me lo pusieron en mis brazos; cansada, asustada por la experiencia, dolorida aún, pero feliz, ya estaba conmigo, con su mami.
A pesar de la oscuridad de la habitación, no pude dejar de mirarlo, de besarlo, contando una y otra vez sus deditos (por si le faltaba alguno), en mi mente una pregunta ¿le puede querer alguien más que yo? Comprendí en ése momento como se quiere a un hijo.
Aún está en mi retina su primera imagen, en mis manos el tacto y el calor de su piel y nunca se irá de mi el cariño y el amor de madre hacia esa personita a la que le di la vida: mi hijo, Alejandro.
Ya no me encontraba sola, le tenía a él.
Hoy hace 30 años.
Con ésta entrada en “Mi cocina” virtual quiero transmitirle el cariño de su madre y desearle todo lo mejor y con algo dulce y que le gusta: el chocolate y la naranja (cuando muy pequeñito era su color preferido).
El postre: crema de chocolate y naranja.
¿Como lo hice?
Mezclar con la batidora tres huevos, dos vasos de leche, cinco cucharadas soperas de azúcar, una cucharada sopera de maizena, medio vaso de zumo de naranja y cuatro cucharadas soperas de cacao (chocolate en polvo), procurando que quede homogénea la crema.
Ponerla en una cacerola y remover constantemente, llevar a ebullición durante uno o dos minutos.
Dejar templar, repartirlo en las copas donde se vaya a servir y meter en el frigorífico.
Mientras poner en una cacerolita la piel de la naranja cortada en tiritas finas con una cucharada de azúcar moreno y un chorreoncito de coñac.
Llevar a ebullición, remover y dejar evaporar el liquido y reservar.
Para presentar la copa, colocar la piel de naranja encima de la crema.
¡¡ FELIZ CUMPLEAÑOS !!
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15 comentarios
Mmm...this looks awesome ...I love this..:)
ResponderEliminarTasty Appetite
Precioso relato de un momento tan importante en nuestras vidas.....y la cremita....ummmm deliciosa
ResponderEliminarun biquiño
Feliz cumpleaños para tu "peque". Que cumpla muchisimos más, guapetona.
ResponderEliminarLa cremita deliciosa, me encanta la combinaciòn chocolate y naranja.
Biquiños
felicidades a la mama, :)
ResponderEliminarEsta combinación siempre queda deliciosa.Feliz finde.
ResponderEliminarEse momento no se puede comparar con ninguno, yo he pasado dos veces por lo mismo y no lo cambio por nada del mundo, incluso dolorida por dos cesáreas, y la última de ellas casi in extremis, pero la sensación es inigualable. Yo todavía tengo la suerte de poder cogerlos en brazos y arroparlos por la noche, tu ya lo tienes crecidito. Felicidades a tu hijo y a tí por ser madre, que ya es bastante, y un lujazo de postre. Un beso.
ResponderEliminarFelicidades a tu hijo, que mejor regalo para él, que tu que eres su madre y esa crema que les has preparado con tanto amor.
ResponderEliminarBesos. Lola
Cuando nace un hijo, nace una madre, felicidades a los dos.
ResponderEliminarUn beso.
Ves?, no puedo faltar. Emocionante entrada. Y sabes?... mi hijo mayor (38) tambien se llama Alejandro.
ResponderEliminarFelicidades por ser tan buena madre y felicidades a tu hijo.
Esa crema, tiene que estar deliciosa.
Besazos
Siento llegar tan tarde, pero primero de todo felicidades a Alejandro, 30 años y lo bien que lo recuerdas, esto no se olvida, verdad? Mi hijo mayor tiene 28 y también lo recuerdo todo muy claro.
ResponderEliminarLa crema de chocolate es muy sencilla, pero rica en combinación con la naranja.
Besos.
Una combinación riquísima, Carmen! Y felicidades a tu "peque"! Besitos.
ResponderEliminarFeliz cumple para tú hijito! Muy bonito el recuerdo , verdad? A mi no me hizo mucha gracia verlo la primera véz, éra feucho, negrito y con el pelo rizado ( nadie de mi familia tenía el pelo así) y pensaba que me lo habían cambiado, pero el día siguiente éra diferente y empiece a quererlo con locura, hasta hoy en día!
ResponderEliminarLa crema de chocolate así combinada con el sabor de naranja tiene que estar de muerte!
Qué bonita entrada dedicada a tu hijo, Carmen Rosa. Supongo que el amor a un hijo es tan fuerte...Seguro que está orgullosísimo de su madre.
ResponderEliminarPerdoname si apenas me paso a verte, estoy bastante desconectada de los blogs, pasando unas vacaciones blogueras.
La cremita tiene que estar de vicio :-)
Un besazo grande!
FELICIDADES a ti y a tu hijo por esos 30 años disfrutanlos mutuamente, el mio cumple 34 en noviembre, y tampoco se me olvida esos momentos, creo que a ninguna madre se le olvida estos momentos tan maravillosos a la vez que duros, asi que te entendemos cielo, un besito y disfruta de el siempre como si fuera niño
ResponderEliminarQue homenaje tan bonito a tu hijo, a mi me has puesto la piel de gallina, y es que no se sabe hasta dónde llega el amor de una madre hasta que no pasamos por ello. La crema de chocolate debe estar de muerte, para cuando merendamos? jeje
ResponderEliminarUn beso guapa.
Muchas gracias por visitar "Mi cocina", por escribir un comentario, lo cual me anima a continuar compartiendo lo que se cuecen por mis fogones y lo valoro enormemente.
Si tiene alguna duda o consulta, indiquelo, contestaré lo antes posible.