ARROZ CON LECHE
Siguiendo las costumbres católicas de antaño, era habitual bautizar a los hijos y ponerle el nombre del santo del día de su nacimiento, según la creencia cristiana para tener un intercesor en el Cielo; o bien, sobre todo los primogénitos ponerles el nombre de sus abuelos o el de sus progenitores.
Aún está arraigado en Andalucia el celebrar la onomástica, según el santoral de la iglesia católica que lleva el mismo nombre que uno, se suele decir: hoy es mi santo, o mi día, que por lo general coincidía con el día del nacimiento de cada persona; hay que tener en cuenta que celebrar el cumpleaños es algo importado de la cultura anglosajona.
Cambian los tiempos y las costumbres, aunque yo sigo felicitando el día, el santo o la onomástica como se quiera denominar, de las personas a las que quiero.
Hoy es un dia especial en ése sentido, es el santo de mi suegra, era el de mi madre y hubiese querido que fuera el segundo nombre de mi hija: Francisca. Tres mujeres que adoro.
Por ello la receta de hoy tenía que ser dulce, que me recordara a mi madre ya que éste postre lo hacía con frecuencia, mi suegra lo hace exactamente igual que ella, yo intento seguir sus pasos, poniendo el toque de ellas dos: la dulzura y el cariño.
¿CÓMO LO HICE?
Poner 100 gramos de arroz de grano redondo en un colador y lavarlo en el grifo unos segundos, escurrirlo bien.
En una cacerola poner un litro de leche fria y echar el arroz.
Añadir la cáscara de un limón mediano (sólo la parte amarilla, se retirará al final) y un palo de canela entera.
Poner el recipiente a fuego fuerte y comenzar de inmediato a remover con una cuchara de madera, rascando todo el fondo, procurando en todo momento que no se pegue.
Pasado unos minutos, bajar el fuego, manteniendo un leve hervor, sin dejar de remover
Cuando el arroz esté bien cocido y la leche algo espesa, añadir unos 100 gramos de azúcar, mezclar y retirar del fuego.
Nota.- Si se añade el azúcar antes, el arroz con leche quedaría amarillento.
Para mis queridas: madre, suegra e hija.
Francisca: nombre de origen germánico que significa “aquella que es abanderada”.
11 comentarios
Es verdad que para muchas personas es importante el tema de las onomásticas, aunque yo creo que se está perdiendo un poco la tradición de celebrarlo, sólo se quedan los nombres más "importantes" (por decirlo de alguna forma). Yo creo que es bueno por lo menos tomarnos una de estas fantásticas raciones de arroz con leche para celebrar algo especial. Un beso.
ResponderEliminarYo no suelo felicitar los santos, pero como tú sí, felicita a tus tres Franciscas, aunque por lo que leo una de ellas no esté contigo, pero seguro que lo lee.
ResponderEliminarEl arroz con leche es uno de los postres que más me gusta, ¿me dejas comer un poquito?
Muxus
Yo quiero una copita de estas porfa"!
ResponderEliminarLlevas razón y sobre todo en Andalucia se celebra "mi dia" los cumpleaños se han ido introduciendo poco a pcco y van desplazando al santo, una pena.
ResponderEliminarComparto contigo el gusto por el arroz con leche, mi madre lo hacía siempre por mi, ya que yo era la más delicada a la hora de comer y a ese delicioso plato jamás decía que no tenía ganas, y aún hoy es mi perdición.
Felicidades para tus Franciscas
Besitossss wapi
Felicítame a mi también me llamo igual, así que cojo un platito de este arroz con leche tan bueno para celebrarlo.
ResponderEliminarQue rico... Nada como lo natural...
ResponderEliminarReferente a los santos del día...a veces montaban unas.
ResponderEliminarA mi no me pusieron el santo del día, no, pero me arreglaron bien. Te cuento: La abuela materna Remedios, mi madre Remedios, total, que la nieta, Remedios. Hasta ahí bien. Pero... la madrina, que se llamaba Dolores. Y ahí me tienes...Remedios de los Dolores. Sus hijos, los de mi madrina, mientras fuí cria, me llamaban "aspirinita", claro yo no me enteraba del significado. Cuando me enteré no los maté de milagro.
Y esa es la historia de mi nombre "Aspirina Bayer", ea.
Ese arroz con leche tiene que estar de vicio total.
Besazos
Ya sabes...sirvo lo mismo para una buena converssación que para quitarte el dolor de cabeza luego.
El arroz con leche es un clásico que aunque pasen los años sigue estando en el top ten de los postres.
ResponderEliminarBesos.
Pues yo me llamo Pilar, mi santo está a la vuelta de la esquina, y como no quiero hacerte trabajar un día festivo (es lo bueno de mi día, que no se le olvida a nadie...), con tu permiso, cojo una copita de ese rico arroz con leche, postre, que dicho sea de paso, me encanta!!!
ResponderEliminarSaludos.
Pilar "Padawan"
Aunque no me llame Francisca, ni Paca, ni Curra, ni Francis,... ¿me das un tazoncito de arroz con leche? es mi postre favorito!! Aunque yo lo hago a la manera en la que lo hace mi madre, echo el arroz al principio con un poco de agua y azúcar, canela y piel de limón, y la leche la voy añadiendo poco a poco mientras va cociendo y voy removiendo. Aunque también lo hago todo a la vez en la olla o en el robot y sale igual de bueno!
ResponderEliminarUn besazo guapa.
Esta es una de mis recetas favoritas por todo lo que trae consigo su olor y su sabor. Me recuerda a mi niñez, a la familia, a momentos felices que me encanta recordad. Hay sabores que traen consigo muchos recuerdos, por eso me encanta preparar la receta del arroz con leche cada vez que el tiempo me lo permite.
ResponderEliminarMuchas gracias por visitar "Mi cocina", por escribir un comentario, lo cual me anima a continuar compartiendo lo que se cuecen por mis fogones y lo valoro enormemente.
Si tiene alguna duda o consulta, indiquelo, contestaré lo antes posible.