CHAMPIÑONES RELLENOS DE MORCILLA DE BENAOJÁN, CON NUECES FRITAS Y NARANJA CON MIEL

Según la RAE, amistad se define como “afecto personal, puro y desinteresado, compartido con otra persona, que nace y se fortalece con el trato”

Nos gusta tener amigos, pero amigos de verdad, amistades que se van fraguando por la magia del destino, que dejan espacios y ofrecen libertades, que no amarran, que no agobian y que no saben de tiempo.

Amistades que no necesitan de un día a día, sin presiones, sin obligaciones, personas con las que forjamos vivencias, de casualidades que se cruzan y se encuentran, que vienen y van como la brisa de la mar, como los vientos malagueños ya se de levante o de poniente.

Muchos y buenos amigos que nos enriquecen como seres humanos, como personas, con quienes compartir experiencias, vivencias, historias y que siempre nos dejan recuerdos. Y entre ellos Pepo y Maria, con quienes compartimos la pasión por la mar, la gastronomía y la cultura malagueña. 

Ellos son el fiel reflejo de la amistad que consigue que nos sintamos sumamente afortunados; son tesoros que generosamente nos regaló la vida.

Pepo Frade y María Schaller son los propietarios de un templo gastronómico malagueño, apasionados por la gastronomía, con Sabor a Málaga: AIRE GASTROBAR

Él en los fogones con una gran trayectoria profesional, con ése arte que le caracteriza, con una identidad propia e innata basada en la cocina tradicional pero actualizándola a los gustos y tendencias de hoy en día; con un cuidado exquisito, elegante, una cocina donde todo, absolutamente todo lo prepara con sus manos, no hay nada precocinado, primando la calidad del producto de kmO

Valor añadido es la pasión en Aire por la perfección en cada detalle, por la cocina de temporada y por el recetario y productos malagueños.

El arte de María no sólo se refleja como jefe de sala, en cada detalle que enamora en cuanto a decoración, también aporta su gran conocimiento gastronómico y vinícola, su creatividad y su alma incluso en las recetas (famosísimo postre BIZNAGA MALAGUEÑA), cautivando con su saber estar y dirigiendo Aire al mismo compás que Pepo.

Las creaciones de éste magnífico chef se trabajan a “fuego lento”, estudiando, probando, rumiando incluso durante meses hasta que ambos están satisfechos con la combinación de sabores, aromas, respetando la esencia tradicional que trasladan a sus comensales a la cocina de antaño, la cocina de verdad hecha con amor y que cada bocado, cada detalle cuenta una historia.

Porque en definitiva de eso se trata, de alimentar no sólo el cuerpo, también el alma. Y eso lo consiguen en RESTAURANTE AIRE GASTROBAR 

Para mí, Pepo y María son fuente de inspiración, es ir a disfrutar de su cocina en Aire con mi marido, con mi familia y descubrir nuevas ideas, nuevos platos que me cautivan y que me animan a cocinar, preparar e intentar hacerlo procurando, a veces sin conseguirlo ya que es sumamente difícil estar a la altura de éste gran cocinero.

En su nueva y actual carta descubrí éstos CHAMPIÑONES CON MORCILLA DE BENAOJAN, NUECES PECANAS Y MANDARINA

Un verdadero placer gastronómico que nos hace viajar a los bosques del Genal o de las Sierras de las Nieves con las setas o champiñones, a la Comarca de Ronda con sus embutidos únicos y al Valle del Guadalhorce donde las nueces y los cítricos tienen su cuna.

Intentando seguir su genialidad, en mi cocina he preparado éstos CHAMPIÑONES RELLENOS CON MORCILLA DE BENAOJAN, NUECES FRITAS Y NARANJA CON MIEL.

4 champiñones grandes, un trozo de morcilla de Benaoján (Comarca rondeña, en su defecto cualquier morcilla malagueña hecha con manteca “colorá” ), dos naranjas, miel de flores, aceite de oliva virgen extra, sal .

Las nueces fritas son fáciles de preparar en casa, se conservan muy bien durante días incluso semanas en el frigorífico y como postre en sí regadas con miel o acompañando pasteles e incluso ensaladas es ideal. Les animo a hacerlas, la LA RECETA EN ÉSTE ENLACE, PASO A PASO.

Limpiar bien los champiñones, para ello cortar los troncos separándolos con cuidado del sombrero.

Enjuagarlos uno a uno debajo del frigo con agua fría para quitar los restos de tierra y suciedad (no sumergirlos en agua ya que los champiñones absorben mucho el agua y no se cocinarán bien).

Secar cada uno con un paño o papel de cocina a fin de que queden totalmente secos.

Quitar la piel a la morcilla y machacar con un tenedor. Reservar.

En un cazo echar el zumo de las dos naranjas, poner a fuego medio y añadir medio vaso de miel de flores. Remover y llevar a ebullición, dejando cocer durante quince minutos hasta conseguir una consistencia casi caramelizada. Retirar del fuego y reservar caliente.

Poner los champiñones en una sartén engrasada con aceite de oliva virgen extra, poner a fuego fuerte y darle calor durante un minuto por cada lado.

Pasar los champiñones a una bandeja con la parte hueca del sombrero para arriba, añadiéndoles por encima un buen chorreón de aceite de oliva virgen extra y hornear a 180º C durante dos o tres minutos.

Sacar la bandeja del horno, pasar los champiñones al plato donde se vaya a servir e ir rellenándolos generosamente con la morcilla chafada.

Colocar una nuez frita sobre cada uno de ellos y regar generosamente con el zumo de naranja caramelizado. 

Servir inmediatamente, caliente aún.

Ya sólo queda disfrutar de éste manjar.

Idea original del genial chef malagueño y que pueden disfrutar en: