TOÑI SÁNCHEZ, EL TIEMPO EN SUS MANOS. REPORTAJE DE ALFONSO VÁZQUEZ EN LA OPINION DE MALAGA

Suena el teléfono y no me da tiempo a cogerlo, compruebo quien es y la llamo enseguida, suena su voz dulce, cercana, cariñosa y a la vez con ésa personalidad que la caracteriza y como siempre que hemos hablado me saluda cariñosamente. Ella es así, atenta, cariñosa, dulce….una gran mujer y una excepcional profesional del mundo de la comunicación.

Es mi admirada Laura Escobar, periodista que hasta hace pocas semanas coordinaba y dirigía el suplemento gastronómico “El delantal” del malagueño periódico La Opinión de Málaga. Escritora, periodista, fundadora y directora de SOPA DE LETRAS; gran comunicadora especializada en Gastronomía, Comunicación Estratégica Empresarial del mundo de la Cultura, Gastronomía, Sector Agroalimentario y Turismo. Ella, a pesar de su gran trayectoria profesional es realmente encantadora, cercana y sencilla.
Y con ésa sencillez que la caracteriza, me dice: ¿Puedo darle tu teléfono a un compañero de La Opinión de Málaga?. He visto que tú trayectoria profesional, no como bloguera gastronómica, es toda una historia que hay que publicar, se lo he comentado a Alfonso Vázquez y quiere escribir un reportaje sobre ti.

Aún hoy no salgo de mi asombro ¿Cuándo, dónde, cómo hablé con Laura de mi vida laboral? Quizás un comentario, un detalle que ella captó y no le dí en su momento la mayor importancia….Pero como periodista supo ver ése lado de mí como mujer trabajadora en unos años, décadas 70, 80, 90 del pasado siglo y principios del 2.000 en un mundo de la relojería que era de hombres.

Por supuesto, le contesté, es todo un honor. Y a los pocos días me llama ALFONSO VÁZQUEZ 
¡¡ Esto sí que es un gran honor !! Conocer personalmente a un gran escritor y periodista, redactor del diario La Opinión de Málaga, en el que escribe desde 1999 la crónica La ciudad, así como reportajes y noticias sobre problemas vecinales, Historia y Patrimonio de Málaga.

Con una trayectoria profesional realmente espectacular, ha escrito en El Pais, en el mexicano Siglo XXI, en los españoles Diario 16, en Diario Málaga; académico de mérito de la Academia Malagueña de Ciencias, ha publicado numerosos libros recibiendo premios por todo el territorio nacional como por ejemplo:.

Premio José Maria Torrijos de Periodismo en 2004, un año más tarde obtuvo el Jara Carrillo de relatos de humor de Alcantarilla (Murcia). Entre los libros sobre Málaga ha publicado Cien años de noticias en Málaga (C&T,2003), el ensayo humorístico Teoría del majarón malagueño (Almuzara,2007) y La Mirada de Málaga (AZ,2011).

En 2010 obtuvo el premio José Luis Coll (Bombín de Plata) de Novela Corta de Humor por Viena a sus pies, editado por Rey Lear, editorial en la que también ha publicado Livingstone nunca llegó a Donga (2011) y Lo que esconden las islas (2013).

En 2014 ganó el premio García Pavón de Narrativa Policíaca por Crimen on the Rocks (Rey Lear). La obra está ambientada en San Roque-On-The-Rocks, una colonia española ficticia al sur de Inglaterra, en el Condado de Devon, conquistada hace cuatro siglos por la Armada Invencible.

A esta obra le siguieron dos más que conforman la Trilogía de San Roque: La invasión de los hombres loro (Reino de Cordelia, 2016) y El fantasma de Azaña se aparece en chaqué (2019). Y un largo etc…que pone en éstos días su generosidad y sello de oro con el libro 'Málaga Milenaria', una obra a beneficio de la Librería Proteo.

La semana pasada contactó conmigo y quedamos para vernos. ¿Dónde? En casa.

Dos horas que se hicieron cortas, porque hablar con él, es hablar con un maestro. Sinceramente impone a la vez que te hace sentir cercana, con su profesionalidad, su trayectoria, su humanidad y sobre todo por ésa simpatía que le caracteriza.
Y ésa “charla” entre amigos, él con su arte literario imprimió mis más de 31 años de vida profesional en dos páginas, en éste, para mí, maravilloso reportaje que sin lugar a dudas ha conseguido que quede grabado en mi corazón y en mi memoria.
Reportaje por el que le quedamos (hablo también de mi familia, de mi marido Pedro y mis hijos) eternamente agradecida.

Reportaje que reproduzco a continuación íntegramente y que lógicamente les animo a leer en su formato real, en el prestigioso periódico LA OPINION DE MÁLAGA :

TOÑI SÁNCHEZ: EL TIEMPO EN SUS MANOS:

La malagueña Toñi Sánchez ha sido la primera alta directiva de España en joyería y relojería. Desde su sede central en Málaga llevó las riendas de la marca japonesa Orient para la Península Ibérica y viajó por todo el mundo. Ahora, disfruta con un exitoso blog de cocina

En la central de Málaga y en las delegaciones repartidas por toda España la conocían como ‘la jefa’. Fue la primera alta directiva en el mundo de la relojería y la joyería de nuestro país, algo que, hoy jubilada, lleva muy a gala porque se lo ganó, nunca mejor dicho, a pulso.

Toñi Sánchez (Málaga, 1955) es paleña, nieta y bisnieta de jabegotes por parte materna. «La jábega ‘María del Carmen’, de mi bisabuelo, con el nombre de mi abuela, está en el Museo Marítimo de Barcelona» comenta. A su familia la conocen todavía en el barrio como los Rosillas.

Con cinco años, «ya sabía leer y escribir». Todo se lo debió a su madre, Francisca Rodríguez, ama de casa y costurera. «Tuvo una visión de futuro increíble, todo su afán era que yo estudiara; decía que ella ya había pegado bastantes botones y con mi hermano, lo mismo y hoy es profesor universitario. Se volcó en los dos sin diferenciar», sonríe.

Con 7 años su familia dejó El Palo para mudarse a Carranque. Allí compaginó los estudios en el colegio, llamado entonces Carmen Polo de Franco, con clases particulares en verano, en el Camino de Antequera y con sólo 8 años tuvo profesores nativos de inglés. «Mi madre quería que yo hablara inglés, tuvo una influencia total en mi formación», subraya.

Y tras estudiar el Bachillerato elemental en el Gaona, decidió formarse en mecanografía, taquigrafía y redacción de cartas en la Academia Almi de calle Larios. Por entonces, Francisco, su padre, que era conductor de Portillo, conoció a una inglesa jubilada, Violeta Woolridge, y Toñi comenzó a frecuentar su casa en el Rincón para practicar inglés. «En esa época, con 15 años, me iba a las 9 a la academia, luego cogía el autobús al Rincón y estaba con la señora inglesa hasta las 5 de la tarde», recuerda.

Un año más tarde, en 1971, con sólo 16 años le llegó la oportunidad de probar suerte en una joven empresa en El Molinillo, con unas amplias instalaciones en calle Alderete comandadas por emprendedores hindúes procedentes de Tánger. «Cuando llego estaba de director Hiro Wadhumal Balani un visionario y gran trabajador que había cogido la distribución exclusiva para España, Andorra y Portugal de los relojes japoneses Orient, que aquí no se conocían».

La joven malagueña, que entró como administrativa ganando 2.500 pesetas, gracias a su entrega y al tratarse de una persona muy resolutiva, en poco tiempo se volvió imprescindible. Además, al terminar la jornada en Orient enlazaba por la noche con la Escuela de Idiomas, para seguir con el inglés, estudios que completó.

En 1979, Toñi Sánchez era ya la persona de confianza de los dueños de la empresa y su trabajo fue mucho más allá de gestionar la parte administrativa: «Me encargaba del trato con los representantes, distribuidores, pedidos, del almacén...».

Jefa de ventas

La empresa crecía. A comienzos de los 80 se mudó a un lujoso edificio de nueva planta en Compás de la Victoria, 3 con suelos de mármol rojo y maderas nobles en los despachos principales. Uno de ellos era el de Toñi Sánchez dado que en 1983 fue nombrada jefa de ventas de Orient Peninsular. «Ahí empezó todo. El señor Hiro viajaba mucho a Oriente por motivos de filosofía y religión y sin darme cuenta Orient ‘era mío’, me tenía que ocupar de la publicidad, la administración, los relojes... de todo», recuerda.

Por entonces, aunque Orient tenía delegaciones por España, incluida Madrid, y alrededor de 300 trabajadores en total, Málaga seguía siendo la sede central. Reflejo de esa importancia fue el primer marcador electrónico del Estadio de La Rosaleda, por supuesto de la marca Orient. Pero además de relojes, la empresa trajo a España los primeros ordenadores y los famosos juegos Atari. Y con el tiempo, los primeros móviles Motorola así como los relojes Citizen, entre otros productos.

Ese mismo año 83 viajó a Japón para conocer la fábrica de Orient. Esa experiencia de trabajo fue para ella «como viajar al futuro». Por cierto que en ese viaje regaló a los directivos japoneses un cenachero. Para la malagueña comenzaba una tarea como alta directiva con alojamiento en los mejores hoteles del mundo.

Ni mucho menos fue un camino fácil. Como recuerda, «por entonces no había internet, no había forma humana de enseñar los relojes, tenías que ir con una maleta con 200 doscientos modelos a visitar joyerías en Bilbao o en La Coruña. Yo lo he hecho con 26 o 27 años», recuerda.

"Me forjó"

Por otro lado, tenía el hándicap de trabajar en un mundo de hombres. Sin embargo, su condición de mujer nunca fue un obstáculo para ella: «Eso me forjó», confiesa, al tiempo que recuerda que «mi silla le gustaba a todo el mundo». Su actitud no cambió cuando la tercera generación se hizo cargo de la empresa y con ella llegaron grandes cambios. «Yo me decía: me tengo que renovar».

Casada y madre de dos hijos, a veces llegó a emprender largos viajes embarazada. Y no se perdía ningún año la feria internacional de joyería y relojería en Basilea.

Como detalla, su madre murió con sólo 57 años y la conciliación familiar era complicada en un trabajo que le exigía atención 365 días al año. «La suerte es que si mi niño o mi niña estaba malito, tomaba un avión y en una hora estaba en Málaga. El tiempo lo podía controlar yo.

En 2002, la compañía cerró al romper con Orient en Japón. Toñi Sánchez siguió vinculada a la distribución de relojes para toda España «pero no era lo mismo» y se jubiló a los 63 años, después de cotizar durante 42.

Hoy, ‘la jefa’ sigue siendo la misma persona afable y emprendedora y disfruta recuperando la cocina tradicional de Málaga en su exitoso blog ‘Mi cocina’. Pero esa es otra historia que esta sección contará, hablando de Toñi Sánchez a su debido tiempo.

Gracias, muchísimas gracias ALFONSO VAZQUEZ, por escribir tan bonito sobre mi persona; gracias también a LA OPINION DE MALAGA por la publicación y a LAURA ESCOBAR por ver ése lado de mi vida que no tiene nada que ver con la gastronomía, como dice Alfonso: ésa es otra historia.

2 comentarios

  1. Querida Toñi: No pude leer el reportaje que te hizo Alfonso Vázquez pues no estoy registrada y no me dejaba acceder. Gracias a tu publicación he podido leerlo y te felicito enormemente pues me hace muy feliz que se reconozca no solo tu labor como mujer trabajadora en una época tan difícil pero tus innatas cualidades siempre te posicionarán en un podium donde serás la ganadora. Y deja para otro artículo tu papel como bloguera culinaria donde podremos disfrutar de tu biografía como comunicadora, como "cocinitas" entre fogones donde disfrutas al máximo elevando a arte la gastronomía. Muchísimas felicidades por este y por otros tantos reconocimientos que te hacen día a día, en el que se premia tu gran labor desde ese maravilloso blog familiar,

    Un fuerte abrazo y feliz fin de semana campeonaaaaaa, y gracias por ser un modelo para todas las mujeres.

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    1. ¡¡ Sin palabras !! Una vez más, me dejas sin palabras, sólo puedo agradecerte siempre el tenerte como amiga. Eres un verdadero tesoro.
      Un fuerte abrazo.

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Muchas gracias por visitar "Mi cocina", por escribir un comentario, lo cual me anima a continuar compartiendo lo que se cuecen por mis fogones y lo valoro enormemente.
Si tiene alguna duda o consulta, indiquelo, contestaré lo antes posible.