REVUELTO DE ESPINACAS CON LANGOSTINOS, CHAMPIÑONES Y GULAS
Cuando de pequeña saltaba a la comba o botando aquella
añorada y estupenda pelota rugosa de llamativos colores, solía canturrear al
mismo tiempo, al unísono de la cuerda o del golpear de la pelota en la pared o
en el suelo: “Popeye el marinerito, pí, le gusta tocar el pito, pí, y yo que lo
sé tocar, pí, no me lo quiere prestar, pí….”, viendo inclusive los dibujos
animados de Popeye, aún no pensaba en la gastronomía.
Sólo me sorprendía como le gustaban y
necesitaba comer espinadas ¿lo recuerdan?
Era aquel extraño personaje, bajo, calvo, feo y de mal
carácter, aquel marinero tatuado, con una peculiar forma de hablar, siempre con
la pipa de caña de maiz en la boca, con su ojo izquierdo bien abierto y tuerto
del derecho (nunca se supo cómo lo perdió); quizás en una de sus muchas
aventuras a lo largo y ancho del mundo, enfrentándose a diversos enemigos o defendiendo
a su amada Olivia, sobre todo del acoso de Brutus.
Enamorado de Olivia, defendiéndola del acosador Brutus o con
su bebé adoptado que recibió por correo, a quién llamó Cocoliso y siempre,
siempre con su lata de espinacas que le proporcionaba una fuerza
sobrenatural.
Popeye “nació” en 1929 y animó a comer espinacas; la
referencia a las espinacas presente en sus historias, provenía de un estudio
publicado, que debido a un error de cálculo o de imprenta al publicar el
correspondiente estudio, que aseguraba que éstas presentaban un alto contenido
en hierro mayor del aporte de otras verduras u hortalizas, de las que realmente
tienne y datos que se rectificó científicamente hablando en años
posteriores. Pero Popeye, siguió a
pesar de ello recibiendo ésa fuerza especial de tan riquísimas hortalizas
enlatadas y deleitándonos con sus aventuras.
Porque las espinacas no son verduras, desde el punto de
vista botánico, son hortalizas ¿lo sabían?
Se desconoce el origen silvestre de la espinaca, según he
podido averiguar se tiene constancia que los primeros cultivos se realizaron en
la zona del Cáucaso y parte de la antigua Persia. Llegaron a Europa gracias una vez más a las
invasiones árabes; éstos la introdujeron en la dieta medieval de la Peninsula
Ibérica.
En Mi cocina es todo un clásico, aunque siempre las suelo
utilizar para preparar mis clásicos revueltos a los que personalmente soy una apasionada;
aunque de vez en cuando la introduzco en sopas o para preparar un rico flan o pastel,
como prefieran llamarlo (la receta PINCHANDO en éste enlace)
Refritas, en un buen “revuelto” con varios ingredientes donde no me puede
faltar los langostinos, es como más me gustan.
¿Cómo lo hago?
Lavar las espinacas para eliminar posibles restos de tierra y cortar el
tallo dejando sólo la hoja.
En una cacerola echar abundante agua, salándola ligeramente y una vez esté
en ebullición añadir las espinacas.
Cuando vuelva a hervir dejar cocer medio minuto.Echarlas en un colador y enjuagarlas con agua fría, bien bajo el grifo o sumergiéndolas en un recipiente con agua fría y hielo.
Escurrirlas bien, estrujando si es necesario con la mano eliminando el resto
de agua. Reservarlas.
Pelar
los langostinos, picar dos o tres dientes de ajo y trocear los champiñones (en
cuatro trozos cada uno).
En
una sartén echar un buen chorreón de aceite de oliva virgen extra (ya saben mi
consejo, que prueben los aceites malagueños; actualmente uso de la Alta
Axarquia de Málaga).
Pochar
los ajitos al mismo tiempo que los langostinos y los champiñones, dándoles unas
vueltas hasta que tomen color.
Agregar
las espinacas e ir removiendo dejándolas sofreír junto con el resto de los
ingredientes. Salar al gusto.
Añadir
un huevo revuelto (echarles un pelín de sal), remover, añadir las gulas y
dejar cuajar a fuego lento.
Servir
y consumir caliente, acompañando el revuelto con pan tostado.
¡¡
Buen provecho !!
10 comentarios
QUE REVUELTO MAS RICOOOOOOOOO!!!!.BSSS
ResponderEliminarEsto es un revuelto completo, de lujo
ResponderEliminarAsi no las hice nunca y por lo que se ve deben estar riqisisimas, normalmente las pongo con garbanzos o en quiches, ya tengo otra forma mas de hacerlas, besos
ResponderEliminarEsto si que es un buen revuelto en toda regla, ya me lo cenaba hoy yo!
ResponderEliminarBesos
Un revuelto que te quedo de escandalo!! lo veo y se me ponen los dientes largos...besitos
ResponderEliminarComo me gustan los revueltos, y este te ha quedado redondo
ResponderEliminarhoy he cenado de un revuelto de champiñones, espárragos y alcachofas jeje
Voy a probar este que es superior
Carmen qué de información! Nunca está de más que al guíen nos refresque la memoria. Tuerto? Yo creía q Tena un ojo cerrado jajajaja q bueno!! A mi las espinacas no me llaman se las hago a mi chico. Buena pinta tienen eso si!!
ResponderEliminarQue rico revuelto!! Me encantan!!
ResponderEliminarEres única !!como me he acordado de popeye mencionado y contado por mi a mis nietos hace unos dias, esta semana santa pasada, cuando se comieron una lasaña hecha con espinacas y pollo que les gusto mucho, ya los podrían volver a reeditar para disfrute nuestro y de los chavales.
ResponderEliminarEste revuelto es delicioso con ese sabor a mar.. últimamente le estoy cogiendo el gusto a comerlas también crudas en ensaladas, en fín que las espinacas son una gran fuente de energia..si es que, ni Popeye ni tu, teneis un pelo de tontas.. jijijij. Feliz Finde!!
Un revuelto muy completo, de los que me gustan. Ha sido divertido recordar a Popeye, hasta en las portadas de libretas salía, siempre con su lata de espinacas.
ResponderEliminarBesos.
Muchas gracias por visitar "Mi cocina", por escribir un comentario, lo cual me anima a continuar compartiendo lo que se cuecen por mis fogones y lo valoro enormemente.
Si tiene alguna duda o consulta, indiquelo, contestaré lo antes posible.