COQUINAS SALTEADAS AL ESTILO MALAGUEÑO
“Si no hay pasión, se vuelve obligación”
En éstos días de finales de Marzo, con
la luminosidad y la alegría de la primavera, andaba yo allá por el año 2009
dando mis primeros pasos, investigando, buscando, aprendiendo, dando color y
forma a un blog de cocina, a un cuaderno de bitácoras, que se fue convirtiendo
casi en un diario, donde anotar y compartir todas las recetas que preparo
durante ésta travesía gastronómica que realizo en mi cocina.
Quizás fue por ello que éste blog o bitácora, tiene ése
nombre: Mi Cocina.
Todo comenzó con miedo escénico, con la
simple intención de conservar virtualmente las recetas que preparábamos en
casa, las que mi añorada madre me enseñó y a ella la suya, mi abuela “Maria del
Carmen Rosa”….quizás por ello son muchas las entradas que llegué a nombrar, y
ahora me arrepiento cocina típica malagueña, cuando debería haber denominado
éste apartado como cocina tradicional malagueña; cocina que considero es parte
de ésa historia gastronómica de ésta tierra que me enamora.
Algunas de ésas entradas, concretamente
al día de hoy 510 (RECETAS) para ser más exacta, son tan simples, tan sencillas que
cualquier otr@ bloguer@ igual tendría dudas a la hora de publicarlas; yo también a veces lo pienso, todo hay que decirlo.
Pero si no lo hago, “MI Cocina”,
perdería su esencia, su razón de ser, el compartir las costumbres gastronómicas
de éste libro virtual de recetas; sobre todo y ante todo las malagueñas,
orgullosa de mis raíces, de mi tierra y de mi mar…..siempre la mar.
Como por ejemplo unas simple y sencillas
coquinas, como ya ocurrió con ésta entrada de hoy o con unos BÚSANOS….
a veces
pienso que no son merecedores de tener una entrada específica para éste tipo de
platos, como si de recetas dificilísimas de preparar se tratara…y que también
fueron una de las primeras en explicar como hacerlos.
No hace mucho descubrí un BLOG sobre
Málaga, donde leí ésta frase, que literalmente copio:
Tal vez tengamos la suerte que una vez que
nuestra existencia sea polvo, nos mezclemos en un día de calima con el aire que
respiras y cerremos un círculo perfecto donde cada uno de los que habitamos
esta ciudad seamos participes de que Eva quiso morder la manzana para que los
que parió con dolor pudiesen vivir en el trozo de paraíso que a Dios se le
olvidó borrar en su venganza infinita. Málaga....
Y nuevamente, éste humilde rincón malagueño con
un simple plato de coquinas rinde homenaje a éste lugar donde tuve la suerte de
nacer, una Málaga que como yo, muchos piensan y creen que es el Paraiso.
Paisajes, valles, ríos, sierras, mar, sierras,
Sol…..historia, cultura, gastronomía; y ahí, en la gastronomia es donde yo he
intentado poner mi granito de arena.
Pero arena de la playa, del rebalaje,
recordando no sin añoranzas aquellas orillas donde mi gente, hombres y mujeres
de la mar recogían el copo y donde las barcas, las jábegas y los sardinales
miraban al horizonte los días que no podían salir a faenar.
Mucho ha cambiado las playas malagueñas desde
entonces, tiempos quizás no tan lejanos, en los que en toda la costa malagueña
se pescaba y se vivía prácticamente en casi todos los lugares costeros de los
productos del mar.
¿Quién no recuerda que en cualquier playa de
negras arenas carentes de rocas se podía coger cientos de coquinas con las
manos, como si de un juego se tratase? Llenar una lata o un cubito de ésas
finas coquinas malagueñas, delicias de mi tierra….o mejor dicho, de mi mar.
Coquinas que llegaban a aquellas sencillas
cocinas, cuyos platos no necesitaban enmascarar sus productos, desnudas de
elementos para conseguir y apreciar con absoluta y total nitidez los verdaderos
sabores de la tierra….y de la mar.
Hoy en día, prohibido por completo coger
coquinas en la playa, pero tenemos la suerte de conseguirlas en las pescaderías cuando se encuentran en su momento óptimo de capturas y con el
tamaño adecuado para su consumo. Quienes me siguen conocen mi pasión por
los puestos de los mercados de Huelin o el de Atarazanas.
No se necesita más…..un buen producto, dos
minutos para cocinarlas y a disfrutar en buena compañía. Cómo prepararlas fue una de las primeras
entradas en el blog, en diciembre del año 2009, hoy con un poco más de
experiencia bloguera, si me lo permiten, les indico nuevamente como las hago en
mi cocina.
Ingredientes:
Coquinas frescas, aceite de oliva virgen
extra, sal y el zumo de medio limón.
Los pasos a seguir:
En primer lugar, es fundamental que las
coquinas antes de cocinarlas las tengan sumergida en agua con un buen puñado de
sal (intentaremos conseguir el sabor del mar) durante una o dos horas; con ello
se consigue que suelten la posible arena que traigan en su interior.
Cuando se vaya a cocinar retirarlas del
agua.
En una sartén echar un buen chorreón de
aceite de oliva virgen extra y poner al fuego cuando esté muy caliente
incorporar las coquinas, salar y a fuego fuerte saltearlas o removerlas con una
cuchara de madera.
Se irán abriendo,
en un par de minutos estarán listas.
Añadir el zumo de limón y enseguida
emplatar.
Es posible que algunas se resistan y
queden cerradas, pero no se apuren, son las mejores….se abren con los dedos y
disfrutarán de todo el sabor del mar.
3 comentarios
Me encantan, lo malo es que no siempre es fácil encontrarlas, pero cuando las veo en el mercado no puedo resistirme y comérmelas como si de un manjar se tratara.
ResponderEliminarYo creo que este tipo de entradas ha de tener lugar en nuestros blogs, hay que pensar en la gente que empieza en la cocina, seguro que estas entradas les son de gran ayuda.
Besos.
Muy buenas las coquinas, las de Cadiz suelen ser de San Fernando, incluso se pueden coger con las mareas bajas en la playa de Cortadura, recuerdo cuando era una chavala que ibamos a mariscar y siempre cogiamos coquinas, almejas, o muergos, ahora creo que ya no dejan, porque hay que pasar por depuradoras, que tiempos aquellos, nosotras sabemos apreciar el sabor a mar Toñi, hemos nacido en lugares unicos, un abrazo Malagueña
ResponderEliminarHola, Toñi. Qué ricas las coquinas. Coincido contigo que cuando tenemos un producto de esa calidad lo mejor es prepararlo de manera sencilla para apreciar todo su sabor. En casa las comemos así y con abundante ajo.
ResponderEliminarSaludos, Carmina.
Muchas gracias por visitar "Mi cocina", por escribir un comentario, lo cual me anima a continuar compartiendo lo que se cuecen por mis fogones y lo valoro enormemente.
Si tiene alguna duda o consulta, indiquelo, contestaré lo antes posible.